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El regreso presencial
a clases está muy próximo y después de dos años bajo un esquema de educación
virtual debido a la pandemia de Covid-19, ciertamente asegura varios desafíos
para padres, docentes y los propios estudiantes, en varios aspectos.
En esta ocasión
hablaremos de la alimentación escolar, partiendo del objetivo principal que la
alimentación de los niños en edad escolar es asegurar un crecimiento y
desarrollo óptimo.
Una alimentación y
nutrición adecuada en esta etapa permite a los niños crecer con salud, la
enseñanza de buenos hábitos alimenticios debe ser primordial para los padres y
docentes, pues una mala nutrición, tanto por déficit (desnutrición) o por
exceso (sobrepeso y obesidad), puede tener resultados indeseados a corto y
largo plazo.
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Es importante tomar
en cuenta que para una adecuada nutrición el requerimiento energético total de
un niño, se puede dividir en los diferentes tiempos de comida. Según las guías
de alimentación de la FAO y adoptadas por el Ministerio de Salud la proporción
sugerida es la siguiente:
El desayuno: el desayuno es una de
las comidas más importante del día y debería cubrir, al menos, el 20 a 25%
de las necesidades nutricionales. Se deben servir alimentos nutritivos como
lácteos, frutas y panes integrales.
La Merienda:
Debe abarcar al menos de 10 a 15% de las necesidades nutricionales. Es
un tiempo de comida entre el desayuno y el almuerzo o entre el almuerzo y la
cena.
Almuerzo: Es el momento del día
en que se come la comida más consistente y debe aportar al menos 25 - 35%
de las necesidades nutricionales diarias.
Cena:
Debe cubrir de 25 a 30% de las necesidades nutricionales. Debe ser
consumida no muy tarde para evitar que la proximidad al momento de dormir
impida que los niños descansen apropiadamente.
Lonchera nutritiva
y saludable
“A la hora de preparar
la lonchera es importante la selección de alimentos balanceados, insistir en
que todos los alimentos son necesarios y evitar la comida chatarra y los
alimentos muy procesados”, menciona Francisco Herrera Morales, nutricionista
de Productos Nevada.
En este aspecto el Ministerio de Educación (Meduca) y
Ministerio de Salud (Minsa) desde el 2018 prepararon una Guía Básica para la Oferta de Alimentos
Saludables en quioscos y cafeterías de centros educativos, como medida para
mejorar la nutrición de la población escolar, una guía que incluso se sugiere a
los padres tomar en cuenta a la hora de preparar una lonchera saludable. Algunas de las recomendaciones son: cereales,
néctares, yogurt, agua, leche, jugos naturales, cremas,
emparedados, panes integrales y frutas.
Los néctares y leches
saborizadas reducidas en azúcar son una opción saludable para darle a los niños
en etapa escolar, son alimentos nutritivos, con mucho sabor y muy prácticos
para colocar en la lonchera.
Los néctares de
Nevada además de estar reducidos en azúcar, contienen hasta un 40% de fruta,
sin edulcorantes artificiales y fortificados con multivitaminas. “Estos
néctares tienen múltiples beneficios en sus ingredientes como vitamina C,
vitamina B6, vitamina B12, ácido fólico y zinc. Cada uno de estos elementos
puede ayudar a reforzar el sistema inmune, contribuir en la reducción del
cansancio, la fatiga, y afianzar la concentración mental”, indica Francisco
Herrera Morales.
Por otra parte, las
leches saborizadas son un alimento novedoso que le permite a los niños
disfrutar de todos los beneficios de la leche mezclados con ricos sabores como:
avena, fresa, vainilla y chocolate. Actualmente
ChocoRico y Avena de Nevada son productos que forman parte de las reducidas en azúcar,
brindándole a esta población escolar un alimento saludable con alto valor
nutricional y con un rico sabor.
“La reformulación de estos productos nos permitió reducir un 27% menos de azúcar en ChocoRico y un 25% en Avena, los cuales han sido endulzados naturalmente con
Stevia sin preservantes
artificiales y lo más importante es que se mantiene la misma fortificación
de vitaminas y minerales necesarias para el crecimiento y desarrollo de los
niños”, añade Francisco Herrera Morales.
Con estas propuestas Nevada
refuerza su compromiso y estrategia para ayudar en la promoción de hábitos
saludables mediante el consumo de leche y néctares reducidos en azúcar, con el
fin de ayudar en la prevención del desarrollo de enfermedades crónicas no
transmisibles como la obesidad, diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares,
que un futuro podrían afectar a la población.