Hoy dejé la puerta de mi cuarto abierta, se metieron los mosquitos y me picaron. Esa comenzón posterior a la picada, me hizo recordar que hace unos meses, fui al interior del país y me picó una coloradilla.
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| Imagen de KidsHealth.org |
Para los que no saben qué es este invertebrado, les dejo la explicación resumida de KidsHealth.org: "las coloradillas (unas garrapatas diminutas propias del continente americano) son unos ácaros de tamaño muy reducido y de color rojo. Sus picaduras no son dolorosas pero provocan un intenso picor al cabo de poco tiempo. Las coloradillas son miembros de la familia de los arácnidos. Son más pequeñas que el punto que escribimos al final de las oraciones. La mayoría solo se pueden ver utilizando una lupa. [...] Tienen unas pinzas diminutas que les permiten adherirse firmemente a la piel de personas y animales. Una vez adheridas, perforan la piel e inyectan su saliva, que contiene unos jugos digestivos que disuelven las células cutáneas. Las coloradillas ingieren las células disueltas y, al cabo de un par de días, se desprenden de la piel, dejando un bultito o verdugón rojo sobre la misma."
Me cuesta creer cómo un bichito tan pequeño, te cause comezón y desespero.
Recordando esto, me vino a la mente que los comunicadores sociales tenemos complejo de coloradilla... ¡Sí! ¡Complejo de coloradillas! Porque esa pequeña garrapata, pica, te rascas, rascas, rascas, y no te la puedes quitar de encima de la piel. Pues, así somos o tenemos que ser los que estamos en esta profesión; ya sea para tener una buena convocatoria, una publicación free press, vender, conseguir una información, lograr una entrevista, etc.
Lo malo es que hay personas que sinceramente no deberían ejercer si no tienen la capacidad de lograr ser "coloradillas" sin dejar de lado el respeto, los derechos, la verdad, la amabilidad y la cortesía hacía el resto de los mortales.
Las ofensas, el tratar mal, ser groseros o faltar el respeto a otros seres, no lleva a nada bueno, nuestra profesión está basada en lo que proyectamos, es por ello, que si actuamos de manera inadecuada, los afectados seremos nosotros mismos; sólo que no dejamos un bultito como la garrapatita esa, si no lo que dejaremos plasmados en esa persona por el resto de su vida y no querrá saber nada de nosotros.
Así que pilas y ser amables con los demás porque ellos no tienen la culpa de nuestro mal humor o estrés.
¡Un abrazo y espero sus comentarios!
